Robert Pattinson: Él era tu novio. Ya saben como es físicamente. No es famoso, es uno más de la universidad. El capitán del equipo de baseball y de football. Tu eras la capitana de las porristas de ambos equipos. Muchas chicas iban detrás de él, pero según él, solo tenía ojos para ti, y quería pasar la vida a tu lado. Tiene 19 años.
Melanie: Ella es tu mejor amiga. También es una niña muy caprichosa y mimada. Sus padres son unos grandes productores de cine. Es bastante atractiva también. Es peliroja, con grandes rizos y grandes ojos verdes. Ella en cambio, no era muy lista ni muy buena deportista, más bien pasaba de todo eso, pues sabía que podría tener cualquier trabajo en el cine por sus padres, que es lo que quería. Tiene 19 años.
Nicholas Jonas: Él es tu mejor amigo desde que tienes memória. Él lo sabe todo sobre ti. Siempre estaban juntos y tenían mucha confianza. Pese a eso, él nunca te presentó a su família ni nada. Tan solo sabías que amaba la música, que tocaba la guitarra y el piano y que amaba cantar. Te encantaba jugar con sus rizos. Él estubo muy enamorado de Melanie. Pero dejó de sentir por ella lo que sentía al darse cuenta de que era algo bich. Tiene 18 años.
Adios a la vida perfecta - Sinopsis
Narras tu
Me levanté temprano, era un día más de mi perfecta vida. Abajo, mi sirvienta personal, María, me tenía preparada ya la ropa, el desayuno, la cartera y la tarea.Tomé los jeans claros, la camiseta de tiras rosa y la cazadora de cuero negra que me había preparado María. No tenía hambre, así que el suculento desayuno que me preparó, se quedó sobre la mesa.
-Annie, querida, deberías comer un poco más -Dijo la anciana mujer, se preocupaba mucho por mi, pero a mi ella no me importaba nada-
-No, no tengo hambre... ¡Adios!
-¿No va a esperar a que su padre la lleve?
-¡Ni loca! Me lleva Rob, dile a mi padre que me voy con él. Adios María
-Adios Señorita
Mi pequeña perrita blanca salió corriendo a despedirme. La verdad, junto con Nicholas, era en la única que podía confiar. Si, ya sé que es raro confiar en un perro, pero es mucho más leal y humano que algunas personas.
-No te preocupes Leslie, volveré pronto
Soltó un alegre ladrido para demostrarme cuanto me quería y trás eso corrí hacia la puerta de salida, cogí unas altas botas negras de tacón, me las puse y salí de casa. Rob ya me estaba esperando ahí.
-Hola princesa
-Hola mi amor. ¿Como amaneciste?
La verdad, ese chico me gustaba mucho, pero a veces tenía la sensación de que él no sentía lo mismo por mi.
-Ahora que te veo estoy mejor mi vida.
-Ay, que eres de tierno...
-Es que estándo a tu lado todo me parece mejor
-Oh... Te amo
-Y yo. Cuando acabemos la universidad nos casaremos y nos iremos a vivir lejos, muy lejos. Tu y yo solos
-Sería perfecto
-Lo será, venga vamos nena, que llegaremos tarde a clase.
-Sí, vamos.
Llegamos a la universidad. No vi a Melanie por ningún lado. Cuando acabamos las clases fuí al cuarto de baño, estaba yo sola. Me miré al espejo para arreglarme el pelo. Echaba de menos mi melena rubia, me la teñí haría como dos años totalmente de negro... Me miré de arriba a abajo... ¿Me estaba engordando? ¡NO NO NO! No por favor. Tenía que seguir teniendo mi barriga totalmente plana y mi cintura de avispa. Entonces, al ver que engordaba pensé... ¡Hacía un mes que no tenía el periodo! Desde... Desde la fiesta de Rob... En aquella fiesta nos emborrachamos totalmente y... ¡lo hicimos sin protección! Ay no por favor... Que no sea lo que yo estoy pensando...
-¡Tía! ¿Dónde estabas?
-¿Melanie? Pues en clase ¿dónde sino?
-Pues en el gimnásio acostándote con David
-¿¡Te acostaste con David!?
-¡Chíllalo un poco más guapa!
-Lo siento, es que ese tío está... Dios como está
-¡Lo sé!
-Bueno tía, vamonos ¿no?
-Yo me voy a quedar a ver a David en el entrenamiento
-¡Ay! Rob también entrena, bueno, yo tengo que irme urgentemente. Dile a Rob que tube que irme
-Okey, adios tía
-Adios Mel
Tomé el tren y fui hasta el hospital. Una vez ahí fui hasta la consulta del ginecólogo. Tenía nauseas desde hacía unas semanas, y algún que otro mareo. Entré a la consulta, y él hizo la prueba. Al cabo de un rato apareció de nuevo.
-Señorita Bleu, efectivamente está usted embarazada. Enhorabuena
-Q... ¿qué? ¡¿EN SERIO CREE QUE ES DE ENHORABUENA ESTAR EMBARAZADA CON 18 AÑOS?!
Rompí en llanto y fui corriendo hasta mi casa. Ahí me esperaba María. Triste y abatida.
-¿Ya se ha enterado señorita?
-¿Enterarme? ¿De qué?
-Del accidente
-¿Accidente? ¿Qué accidente?
-Del avión de sus padres
-¡¿Qué?! ¿¡Tubieron un accidente!?
-Si señorita -Una lágrima caía por su mejilla- Ambos murieron
-¡¿¡QUÉ!?! ¡¡NO PUEDE SER!!
-Lo siento señorita, yo... tengo que irme.
-¡NO! María, no puedes dejarme
-Lo siento, me mandaron a otra casa, normas de la empresa...
-¡No María! Tu también no
-Lo siento, adios
La vi alejarse poco a poco, con una pequeña maleta en la mano. Y mi llanto comenzó más fuerte. Estaba embarazada y mis padres habían muerto. Mi sirvienta, señora de coifidencias, también me había dejado. ¿Podía ocurrir algo peor? Sí. Cuando algo va mal, siempre puede ir peor. Llamé a Rob para que viniese a verme, al escucharme llorar, vino muy rápido.
-Princesa ¿qué te pasa? ¿Por qué lloras?
-María se ha ido
-Bueno, es solo una sirvienta, tus padres contratarán a otra
-¡Mis padres han muerto! -Mi llanto cada vez me cortaba más las palabras-
-¿CÓMO? Lo siento mucho mi amor -Me besó tiernamente y trás eso me abrazó- Tranquila... Todo pasará
-Te... Tengo que decirte otra cosa...
-Dime mi amor, sabes que siempre puedes contar conmigo
-E...Estoy... Embarazada
-¿¡Qué!? :|
-S...Sí. Me enteré hoy
-¿PERO CÓMO?
-El día de la fiesta
-Pero sí...
-No... No nos protegimos
-¡Esto es una locura! Tengo que irme. Adios
-¡¿Qué?! No Rob, no me dejes
-Lo siento Annie pero es que es un hijo. No puedo, lo siento, de verdad
-No es UN hijo... es NUESTRO hijo
-Annie, un hijo supondría mucha responsabilidad, a de más yo... No te soy fiel
-¿¡Qué!?
-Sí... Me acuesto con Melanie, y con muchas otras chicas. No puedo seguir con esto. Adios
-Robert...
Vi como él también se alejaba de mi vida. En la puerta estaba Melanie, hablaron algo y me miró con cara apenada.
-¡OS ODIO!
Trás ese fuerte chillido, cerré con un fuerte portazo la puerta. Y cai en el suelo, llorando a mares. Mi vida estaba totalmente destrozada. No, no lo estaba, siempre podía ir a peor.
Hola!
ResponderEliminarMe encanto la sinopsis
Sigue
Va a ser genial
Bye
Vale